MADRID, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard (EEUU) han identificado cinco rasgos que parecen determinar la efectividad de un aparato oral en el tratamiento de algunos tipos de apnea del sueño.
La apnea del sueño provoca que haya momentos durante el sueño en que el aire no puede fluir normalmente a los pulmones, normalmente debido al colapso de los tejidos blandos en la parte posterior de la garganta o la lengua que generalmente causa la obstrucción del flujo de aire. Para prevenir la obstrucción se utiliza CPAP, una máscara que ejerce una presión positiva continua en las vías respiratorias.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard quiso averiguar si la utilización de aparatos orales podría mejorar la apnea del sueño, como explicaban en la nueva investigación publicada en 'Annals of the American Thoracic Society'.
Los investigadores decidieron medir los rasgos que causan la apnea del sueño a través de la polisomnografía, la prueba utilizada para diagnosticar la apnea del sueño. Para este estudio, los investigadores analizaron datos polisomnográficos ya recopilados de 93 adultos con una edad promedio de 56 años que fueron diagnosticados con apnea del sueño moderada a severa.
Así, los científicos analizaron dos rasgos relacionados con la vía aérea superior: la colapsabilidad y la compensación muscular. Los investigadores encontraron que los pacientes sin colapso severo se beneficiaron más del aparato oral que aquellos sin este rasgo. Por otro lado, aquellos con una respuesta refleja más débil de los músculos de la garganta que actúan para mantener una vía aérea abierta -es decir, con una compensación muscular más baja- también se beneficiaron más que aquellos con una respuesta refleja más fuerte.
Los investigadores también encontraron que otros tres rasgos no relacionados con la vía aérea superior ayudaron a predecir aquellos pacientes que responderían en un grado menor a un aparato oral: una mayor ganancia de asa -que mide cómo de agresivamente responden el cerebro y los pulmones a la caída de oxígeno-, un menor umbral de excitación -la facilidad con la que una persona se despierta del sueño- y una mayor respuesta ventilatoria a la excitación -la profundidad del sueño.
Con base en estos cinco rasgos, se pronosticó que los dispositivos orales serían efectivos para tratar la apnea del sueño en más de la mitad (61%) de los participantes. Los pacientes en este grupo experimentaron una reducción del 73 por ciento en el índice de apnea-hipopnea, que es el número de pausas respiratorias por hora que dura 10 segundos o más. Con un aparato oral, tenían solo ocho apneas/hipopneas por hora. Por su parte, el otro grupo de pacientes experimentó una reducción menor en el índice de apnea-hipopnea y tuvo el doble de pausas respiratorias restantes con el aparato oral.
UNA TERAPIA ALTERNATIVA
"Dado que los aparatos orales funcionan al mejorar la capacidad de colapso de la vía aérea superior, los pacientes sin colapso realmente severo tienen más probabilidades de beneficiarse de un aparato oral, mientras que aquellos con apnea del sueño causada por otros rasgos, como respuestas reflejas exageradas a las caídas en los niveles de oxígeno, son menos propensos a beneficiarse", ha explicado Scott Sands, profesor asistente de medicina en la Facultad de Medicina de Harvard y Hospital Brigham and Women's en Boston.
En base a estos hallazgos, los autores escriben que, si sus resultados se mantienen en estudios futuros, un aparato oral podría considerarse, junto con CPAP, como una terapia de primera línea para tratar cierto tipo de apnea del sueño.
"Si bien el CPAP es excelente para algunos, sigue habiendo un gran grupo de pacientes que realmente luchan con él", ha explicado el doctor Sands. "Para estas personas, este estudio destaca el beneficio potencial de medir las causas subyacentes de su apnea del sueño para estimar si un aparato oral podría ser una opción equivalente o mejor que la CPAP para el tratamiento de su apnea del sueño".