MADRID 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato de Enfermería (Satse), ante el Día Mundial de la Salud que se celebra mañana 7 de abril, ha hecho un llamamiento a las Administraciones públicas para que inviertan en políticas de promoción y prevención de la salud, ya que "los costes económicos asociados a la curación son muy superiores a los que se puedan emplearse en políticas preventivas".
"Elaborando y promoviendo políticas saludables se evitarían, por ejemplo, malos hábitos que provocan enfermedades crónicas, que llevan asociadas elevados costes sanitarios", advierten en un comunicado. De hecho, diversos estudios muestran que el 50 por ciento de los determinantes de salud son conductuales, es decir, modificables, y sobre ellos se puede incidir, especialmente, a edades tempranas.
El papel de la enfermería en este campo, explican desde Satse, es fundamental ya que tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el propio Ministerio de Sanidad otorgan a las enfermeras "el papel primordial a la hora de desarrollar las políticas de promoción y prevención de la salud".
"Es necesario, por tanto, que las Administraciones implicadas asuman la necesidad de potenciar el papel que desempeña la enfermería en este campo acercándolo a la sociedad tanto por medio de las consultas de enfermería en Atención Primaria y Especializada como desarrollando el papel de estos profesionales en los centros escolares", añaden.
Asimismo, explican que "es necesario interioriza que el nivel de calidad de vida de una sociedad no se mide por el número de ciudadanos atendidos en los centros asistenciales sino por las políticas de prevención y promoción que se desarrollan" y, en este sentido, afirman estar en disposición de liderar este campo ya que los profesionales de enfermería españoles "están considerados como unos de los mejor formados del mundo. Sólo es necesario invertir en prevención".
Por otra parte, demandan el desarrollo de la enfermería escolar, "un campo profesional todavía por desarrollar", que permitiría abordar de forma completa la salud integral del niño, sobre todo en aspectos como la alimentación, prevención de accidentes, detección y seguimiento de enfermedades crónicas, el consumo de drogas, la educación sexual,, etc.
Por otra parte, desde el sindicato se considera incongruente que, "por ejemplo, nadie discuta la necesidad de que los centros productivos cuenten con enfermeros de empresa pero, sin embargo, obvian que los centros escolares --con más población susceptible de ser atendida-- no tienen la obligación de disponer de profesionales que vigilen la salud de los alumnos, muchos de ellos con patologías consideradas crónicas".
