MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato de Enfermería, SATSE, y más de 40 organizaciones sindicales y profesionales de Europa han abordado la problemática de la violencia en el trabajo en una jornada celebrada en Budapest, con el objetivo de proponer nuevas medidas y políticas a las diferentes administraciones públicas europeas que acaben con las agresiones que sufren los profesionales de sectores públicos, como el sanitario.
Organizado por la Confederación Europea de Sindicatos Independientes (CESI), el simposium 'Trade unions for zero tolerance towards third-party violence at work' ha contado con la asistencia del presidente de SATSE, Manuel Cascos, y la secretaria de Relaciones Internacionales del sindicato, Esther Reyes, quienes han compartido con otros países europeos la necesidad de impulsar actuaciones más eficaces en contra de la violencia en el ámbito laboral.
Uno de los aspectos destacados en el encuentro fue la necesidad de que los diferentes Estados europeos prioricen la implantación y desarrollo de estrategias en materia de prevención en sus respectivas políticas laborales que eviten el mayor número posible de casos de agresiones hacia los profesionales.
Una vez que se producen las agresiones, las organizaciones participantes en el simposium de CESI abogaron por una mayor protección de las víctimas, así como un endurecimiento de las sanciones hacia los agresores para que su acción no quede impune en ningún caso.
"Hay un consenso generalizado entre las organizaciones que defendemos los derechos e intereses de los profesionales de distintos sectores públicos de toda Europa de que la violencia en el trabajo es un problema de tal alcance y calado que, si no se toman medidas más ambiciosas y contundentes, no solo no se resolverá sino que seguirá yendo a más en los próximos años", han señalado desde el Sindicato.
Para SATSE, acabar con la violencia hacia los profesionales sanitarios requiere en nuestro país de una Ley estatal que garantice el desarrollo en todos los servicios de salud de las actuaciones necesarias (información, formación, sensibilización...) para evitar todo tipo de agresiones y, en caso de que éstas se produzcan, que el profesional agredido cuente con todo el respaldo y apoyo necesario.
Al respecto, la organización sindical ha elaborado una propuesta de Ley que espera trasladar al nuevo ministro o ministra de Sanidad, tras las elecciones generales del próximo 10 de noviembre, así como a todos los partidos políticos, para que la hagan suya, si lo estiman pertinente, y en la próxima legislatura se pueda debatir y aprobar en el Congreso de los Diputados.