MADRID 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Johns Hopkins (Estados Unidos) y del Instituto Karolinska (Suecia) han encontrado al analizar el genoma completo de los genes y sus etiquetas reguladoras en pacientes de enfermedad común una clara función de las etiquetas reguladoras en la mediación del riesgo genético para la artritis reumatoide (AR), según publica 'Nature Biotechnology'. Los autores sospechan que su método experimental se puede aplicar para predecir factores de riesgo similares a otras enfermedades comunes, infecciosas, como la diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón.
Los científicos dicen que su estudio sirve de puente entre toda la secuenciación genética del genoma y las enfermedades que no tienen una causa genética simple o directa. La mayoría de los cambios genéticos asociados con la enfermedad no se producen en las regiones codificantes de proteínas de ADN, sino en sus regiones reguladoras, explica Andrew Feinberg, profesor de Medicina Molecular y director del Centro de Epigenética del Instituto de Ciencias Básicas Biomédicas de la Escuela Universitaria de Medicina de la Universidad Johns Hopkins.
"Nuestro estudio muestra cómo la genética y epigenética pueden trabajar juntas para causar la enfermedad", dice. Según Feinberg, se sabe que varias mutaciones de ADN confieren un riesgo para la artritis reumatoide, pero parece que hay factores adicionales que inhiben o aumentan el riesgo, entre ellos, "etiquetas" químicas que se unen a secuencias de ADN, que forma parte de un sistema epigenético que ayuda a regular cuándo y cómo las secuencias de ADN se utilizan para crear las proteínas y cómo afectan a la aparición o el progreso de la enfermedad.
Para complicar las cosas, Feinberg apunta que la fijación de las etiquetas de secuencias particulares de ADN puede en sí ser regulada por genes. "Los detalles de las causas de una secuencia particular para ser marcados no están claros, pero parece que algunos eventos de marcado dependerá de ciertas secuencias de ADN. En otras palabras, los eventos de marcado están bajo control genético", dice. Otros episodios de marcado, sin embargo, parecen depender de procesos celulares y los cambios ambientales, algunos de los cuales pueden ser el resultado, en lugar de la causa, de la enfermedad.
Para separar estos dos tipos de eventos de marcado, los investigadores catalogaron las secuencias de ADN y sus patrones de marcado en las células blancas de la sangre de más de 300 personas con y sin una forma de artritis reumatoide y filtraron las etiquetas que no parecen afectar al riesgo de la enfermedad. Por ejemplo, si las etiquetas fueron vistas en la misma secuencia de ADN en aquellas personas con y sin artritis, se asumió que las etiquetas de estos sitios eran irrelevantes para la causa o el desarrollo de la enfermedad.
Luego, de entre las etiquetas correspondientes a artritis reumatoide, se redujo en las etiquetas en cuya colocación parecía ser dependiente de secuencia de ADN. Por último, se aseguraron de que las secuencias de ADN que se identificaron fueron más prevalentes en los pacientes con la enfermedad, de esta manera, se crea una lista de secuencias de ADN asociadas con alteraciones de los patrones de ADN marcados, ambos asociados con la artritis.
En última instancia, el equipo identificó diez sitios de ADN que fueron etiquetados de manera diferente en los pacientes con AR y cuyo etiquetado pareció afectar el riesgo para la artritis. Nueve de ellos estaban dentro de una región del genoma que se sabe que juegan un papel importante en las enfermedades autoinmunes, mientras que el décimo fue en un gen que nunca antes había sido asociado con la enfermedad.
"Puesto que la artritis reumatoide es una enfermedad en la que el sistema inmunológico del cuerpo se ataca a sí mismo, los tratamientos actuales a menudo implican la supresión de todo el sistema inmune, lo que puede tener graves efectos secundarios", explica Feinberg. Por ello, entiende que los resultados de este estudio pueden permitir a los médicos apuntar directamente a los genes culpables y/o sus etiquetas.
"Nuestro método nos permite predecir qué sitios de etiquetado son los más importantes en el desarrollo de una enfermedad. En este estudio, se buscaron sitios de etiquetado bajo control genético, pero las etiquetas similares pueden ser provocadas por exposiciones ambientales, como fumar, así que hay muchas aplicaciones para este tipo de trabajo", dice Yun Liu, investigador principal del proyecto.