MADRID, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS) ha reivindicado que la respuesta a la pandemia de COVID-19 de todas las comunidades autónomas "debe basarse en la ciencia y la cooperación con las demás autoridades sanitarias".
A través de un comunicado, lamentan que "persiste una inadecuada coordinación entre las distintas administraciones sanitarias que dificulta la gestión de la pandemia en nuestro país". "Todas las autoridades, estatales y autonómicas deberían coordinarse evitando el conflicto. Es necesario observar principios esenciales de buen gobierno, como la lealtad institucional", señalan.
Al respecto, consideran que el Consejo interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) debe ser el órgano donde se fije la "coordinación entre una necesaria estrategia nacional y las estrategias más específicas de cada territorio". "También el foro en torno al cual se alcancen los consensos científicos para la adopción de planes de contingencia y medidas generales y la fijación de criterios que orienten y sincronicen las decisiones de los gobiernos autonómicos", añaden.
De esta manera, ven "imprescindible" una planificación "racional" según los principios de la epidemiología generalmente aceptados, así como un plan de contingencia marco común, especialmente de la vigilancia y detección de contactos, seguimiento, análisis, diagnóstico y aislamiento de contagiados. "Resulta fundamental en la planificación ante la pandemia la prevención comunitaria que genere reciprocidad y facilite la ayuda mutua al tiempo que refuerce la confianza tanto en los decisores políticos como en el propio sistema de salud", resaltan.
Por otro lado, piden no poner la economía en un lado de la balanza y la salud en el otro, "como erróneamente defienden los responsables de algunas comunidades autónomas", sino de "un equilibrio mucho más complejo". "No tomar medidas duras de respuesta y contención para salvar la actividad económica es una estrategia condenada al fracaso. Los países que tienen más infectados, hospitalizados y fallecidos son los que también tienen peor comportamiento económico. La economía no se recuperará hasta que consumidores e inversores no recobren la confianza gracias a una disminución drástica de las infecciones y la percepción de que las medidas gubernamentales son coherentes", insisten.