MADRID 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
Expertos reunidos en la Jornada 'La profesionalización de la Gestión Sanitaria', que, organizada por el Círculo de la Sanidad y la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa) han abogado por crear alguna titulación o certificado de calidad que acredite la capacidad de gestión de los profesionales de la gestión sanitaria.
"No basta con acreditar una gran experiencia en la gestión. No basta con un conocimiento básico, es necesario un conocimiento específico, dirigir un hospital no es igual que dirigir un hotel u otro tipo de empresa", ha comentado el doctor adjunto a la Dirección de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid, Jesús María Rodríguez Alejandre.
Asimismo, el director general de Atención Primaria del Servicio Madrileño de Salud, Antonio Alemany, ha aseverado que el camino "más recto" hacia la excelencia en la gestión es "prescindir de 'amiguismos' y dejar la gestión en manos de profesionales con experiencia acreditada.
El presidente del Círculo de la Sanidad, Ángel Puente, ha destacado también la necesidad de la 'separación de poderes' en el sistema sanitario, en virtud de la cual sean los políticos los que marquen los objetivos generales a alcanzar y los profesionales de la gestión los que, al margen del color político del que ostente el poder, hagan lo necesario para cumplir esos objetivos.
Estas declaraciones han sido corroboradas por el consejero catalán de Salud, Boi Ruiz, quien ha recordado que los políticos tienen que decidir "el qué" y los gestores deben determinar el cómo.
No obstante, ha advertido que la gestión sanitaria ha ganado en complejidad en los últimos años y que esa independencia de actuación en la gestión debe ir acompañada de un mayor nivel de capacitación y responsabilidad.
"El gestor ya no solo tiene que rendir cuentas a la Administración para la que trabaja sino a tres grupos de interés que son esenciales para el correcto desempeño de sus funciones: los pacientes-ciudadanos, a los que debe garantizar una atención de calidad; los profesionales, a los que debe garantizar el mejor entorno posible para desarrollar su labor; y los contribuyentes, que cada vez más exigen que el dinero de sus impuestos sea empleado de la mejor forma posible", ha puntualizado.
En esta línea, el presidente de SEDISA, Joaquín Estévez, ha recordado que los directivos de la salud tienen la responsabilidad y el reto de hacer de motor de cambio y liderar la evolución del modelo sanitario que se necesita, el cual, a su juicio, debe aportar calidad frente las "deficiencias asistenciales, resultados frente a la inercia de la gestión y sostenibilidad frente a la ineficiencia".
Para cumplir con esa responsabilidad de la mejor forma, Estévez ha subrayado la importancia de por potenciar la cualificación profesionales de los gerentes del Sistema Nacional de Saludad y ha propuesto la creación de un Área de Capacitación Profesional dentro del sistema para garantizar la capacitación de los directivos sanitarios.
En este sentido, el director del Sector Sociosanitario de ILUNION, Eusebio Azorín, ha recordado que, de media, el 45 por ciento de los presupuestos de las comunidades autónomas se dedican a Sanidad por lo que semejante cantidad de recursos públicos "deben ser gestionados por los mejores".
GESTIÓN PÚBLICA O GESTIÓN PRIVADA
Por otra parte, en la segunda mesa de debate de la jornada se han analizado los modelos de gestión empresarial de la Sanidad y el debate sobre si existen realmente dos modelos diferentes de gestión sanitaria: el público y el privado.
Al respecto, el director del Hospital NISA-Aravaca, Manuel Vilches, ha afirmado que se habla de calidad asistencial lo "menos importante" es de quién sea la titularidad del centro.
"La principal diferencia entre gestión pública y privada es la mayor limitación en la gestión del sector público, especialmente en lo referente al personal. Realmente, el sector público gestiona de forma bastante eficiente para las herramientas que tiene", ha incidido el consejero delegado de ASISA, Enrique de Porres.
Además, el director general corporativo de Operaciones de IDC Salud, Pedro Rico, ha comentado cómo el principal reto de los gestores del sector privado ofrecer la "misma calidad asistencial" del sector público y hacerlo a un coste inferior.
"El objetivo común para la sanidad pública y la privada acabar con la 'guerra de precios' en el sector que está afectando a los proveedores de bienes y servicios sanitarios y que de continuar podría acabar afectando a la calidad asistencial del sistema", ha planteado el director general de Salud de DKV Seguros, Juan José Ruiz.
Finalmente, el director del Hospital Clínico de Madrid, José Soto, ha resumido las características de un buen gestor a la luz de las aportaciones realizadas en la jornada: capacidad de gestión, acreditada, avalada o incluso reglada; tiempo estratégico, es decir, cuatro o cinco años de margen para desarrollar un proyecto; ética y valores, resumidos en eficiencia, equidad y transparencia; liderazgo y, por último, optimismo.