MADRID 23 May. (EUROPA PRESS) -
Los Estados miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) han aprobado este viernes una "histórica" resolución para fomentar y priorizar un enfoque integral de la salud pulmonar, lo que supone un "avance significativo" para abordar en todo el mundo las enfermedades respiratorias, tanto transmisibles como no transmisibles, que en 2021 fueron causantes de 18 millones de muertes a nivel global.
El documento, aprobado durante la 78ª Asamblea Mundial de la Salud, incluye medidas como el desarrollo de una política nacional que abarque tanto las enfermedades pulmonares transmisibles como las no transmisibles, mediante la colaboración multisectorial y multidisciplinar, y a través de la participación de todos los sectores pertinentes, tanto a nivel gubernamental como social, tales como salud, medio ambiente, trabajo, educación y finanzas.
Los países también han coincidido en la necesidad de incorporar un enfoque integral de la salud pulmonar en los servicios de Atención Primaria, de forma que se logre una cobertura sanitaria universal que incluya servicios integrales de salud pulmonar, con vías de derivación eficaces a la atención secundaria y terciaria.
Asimismo, se pretende fortalecer la concienciación sobre los impactos de la contaminación atmosférica en la salud; mejorar las normas nacionales de calidad del aire y la capacidad de monitorización; o crear y aplicar normativas adecuadas que protejan a los trabajadores de los factores de riesgo ocupacional que afectan a la salud pulmonar.
Otro de los puntos incluidos en el texto consiste en fortalecer los programas de salud pulmonar con un enfoque integral para fortalecer la promoción de la salud, los servicios de prevención primaria (control del tabaco y del vapeo, la reducción de la exposición a la contaminación del aire en interiores y exteriores) y los programas de vacunación contra infecciones respiratorias prevenibles.
Las autoridades también deberán actualizar o desarrollar directrices clínicas y de salud pública basadas en la evidencia para medidas costo-efectivas para la detección temprana, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades pulmonares transmisibles y no transmisibles, incluyendo el uso de tecnologías innovadoras.
Los países se han comprometido igualmente a actualizar o desarrollar mecanismos de información, basados en la evidencia, para la formulación de políticas y el seguimiento, la evaluación y el aprendizaje de programas.
Del mismo modo, se buscará mejorar el acceso, la asequibilidad y la disponibilidad de medicamentos, vacunas y tecnologías sanitarias seguros, eficaces y de calidad, basándose en la Lista Modelo de Medicamentos Esenciales de la OMS y la Lista Modelo de Diagnósticos 'In Vitro' Esenciales de la OMS.
Las medidas incluyen buscar una reducción del estigma asociado a enfermedades como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la tuberculosis y el cáncer de pulmón, que a menudo dificulta el diagnóstico y el tratamiento tempranos.
Además, abordan "directamente" las necesidades y experiencias de pacientes y cuidadores, cuyas voces "con demasiada frecuencia se han dejado de lado en la formulación de políticas", tal y como han señalado la Sociedad Respiratoria Europea (ERS) y la Fundación Europea del Pulmón (ELF), que han celebrado la adopción de esta "histórica" decisión.
"Esta resolución es un reconocimiento largamente esperado del papel crucial que desempeña la salud pulmonar en los resultados de salud global", ha afirmado la presidenta de la Sociedad Respiratoria Europea, Silke Ryan.
A continuación, ha subrayado que el documento proporciona un marco integral para que los gobiernos integren la salud pulmonar en las estrategias nacionales de salud, garantizando que las enfermedades respiratorias reciban la atención y los recursos que necesitan "con urgencia".
Por su parte, la miembro del Consejo de Defensa de la ERS y miembro de la Comisión de la Sociedad Civil de la OMS, Kjeld Hansen, ha expresado que se trata de un paso "vital" para garantizar que la salud pulmonar deje de ser ignorada y sea "fundamental" para la política sanitaria mundial.
"La pandemia de COVID-19 subrayó la vulnerabilidad de nuestros sistemas respiratorios y la urgente necesidad de una atención médica resiliente y equitativa", ha concluido.