MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (AESTE), Ignacio Vivas, ha asegurado este viernes que casi ninguna residencia de mayores de su entidad recibió alguno de los supuestos protocolos que impedían derivar a hospitales a usuarios con dependencias o diversas patología durante el punto más álgido de la pandemia del coronavirus, y ha apuntado que dichos protocolos solo llegaron a cuatro o cinco centros.
"En ningún momento hubo instrucción al respecto que yo conociera. Las no derivaciones se decidían entre el médico de la residencia y el jefe de servicio en función de las mejores condiciones del paciente. A nosotros como grupo Ballesol no nos llegó ninguna", ha afirmado.
Desde AESTE sí detectaron "que llegó a algunas residencias, que sería un protocolo interno de Sanidad hacia los servicios de referencia dada la situación de la capacidad sanitaria de los hospitales". "En algún momento alguna residencia la recibió, pero no fue algo generalizado. Yo me imagino que (dicho protocolo) se lo envió el geriátrica al médico para darle unas instrucciones", ha explicado este mediodía en la comisión de investigación sobre Residencias y Covid-19 de la Asamblea de Madrid.
Vivas ha recalcado que las decisiones de ingreso o no hospitalario de residentes fueron "estrictamente médicas y en función de su supervivencia de vida". "Nosotros lo pasamos muy mal en las residencias pero del otro lado también fue muy duro", ha dicho.
A preguntas de diputados de la oposición, el interviniente ha respondido que se hubieran salvado vidas si se hubieran derivado a hospitales a todos los residentes contagiados, "pero en detrimentos de otras vidas, porque los recursos son limitados". "En pandemias, guerras y emergencias hay que tomar decisiones, en uno y otro lado. Lo tengo claro", ha manifestado.
Tras insistir algunos diputados, Vivas ha recalcado que desde su punto de vista personal, la actuación de derivación de hospitales fue en ese momento "la correcta" y que los llamados 'protocolos de la vergüenza' fueron una circular interna. "Hubo gente que se derivó y la familia nos pidió que volviera para que muriera a manos del auxiliar. Hubo protocolos de despedida en las residencias con familiares que no hubo hospitales. Si a mí me pasa con 96 años, que no me lleven a un hospital en la situación en la que estaban", ha exclamado.
El portavoz de esta patronal de residencias ha subrayado también que la coordinación que tienen con Atención Primaria ha sido "fluida y excelente", con la dificultades añadidas debidas a la "congestión del sistema". "Desgraciadamente no hemos podido salvar más vidas, pero la situación en esos momentos era la que era", ha apostillado.
MEDIOS Y PERSONAL
El presidente de AESTE ha indicado que los centros dispusieron de medios ya avanzado la pandemia y que estuvieron tres o cuatro días con "cierto déficit" de equipos de protección individual (EPIs). "Nosotros creemos que la protección de los trabajadores es responsabilidad de las empresas, no de las administraciones. Lo primero que hicimos fue comprar material. Luego nos fueron aportaron EPIs de la Comunidad, pero no desde el Ministerio", ha dicho.
El compareciente también ha reconocido que en diferentes reuniones con la Administración regional les pasaban listado de posibles trabajadores, ante el déficit del personal provocado por las masivas bajas de la primera ola del coronavirus, y que incluso el entonces viceconsejero y ahora consejero de Políticas Sociales, Javier Luengo, le propuso aportar nuevo personal para sus residencias, lo que rechazó alegando que estaban cubiertos y que mejor lo necesitarían en otros lugares.
"NO HEMOS REPARADO EN GASTOS"
"Nosotros no hemos reparado en gastos. La pandemia nos pilló sin tener conocimiento de lo que había. Y a esto no le veo más vueltas. Se tomaron medidas lo antes que se pudo, lo antes que se supo. Se intentó hacer todo lo mejor que se pudo. Nadie pensaba que esta pandemia iba a llegar. Yo no lo esperaba pese a que conozco el sector desde hace tiempo", ha afirmado.
Ignacio Vivas considera importante que la Comunidad cerrara al público los geriátricos casi una semana antes que la aprobación del estado de alarma, pero el virus "llegó antes a Madrid y Cataluña por los aeropuertos y cuando le vimos las orejas al lobo, el lobo estaba dentro".
"Hubo residencias con el 100 por ciento de contagiados, y eso no depende de la gestión privada o pública, o que sean más grandes o pequeñas. Allí entraban las familias, porque son hogares. Y ha habido casos de familias que han contagiado a sus padres. Teníamos médicos y enfermeras, pero en muchos casos no se podía hacer nada aunque tuviéramos tres médicos mirando. No reparamos en medios en ningún momento", ha manifestado.
Vivas ha indicado que en este momento los geriátricos "están perdiendo dinero" por el aumento de gastos derivados de la crisis sanitaria y la caída de usuarios. "Ha habido unos gastos extraordinarios que no sé si en algún momento hay que poner encima de la mesa, si hay que resarcir por parte de la Administración en plazas públicas y concesiones. Pero yo creo que las plazas privadas son responsabilidad de nosotros, que para eso somos los empresarios", ha manifestado.
PLAN DE CHOQUE
Respecto al Plan de Choque puesto en marcha por la Comunidad, el presidente de esta patronal ha señalado que colaboraron con las residencias para organizar los servicios, pero que ellos no necesitaban ni ambulancias ni bomberos. Aunque ha reconocido que sin test al principio era difícil la sectorización de los centros, sabiendo que había asintomáticos que podían contagiar.
También ha recordado que acudió la Unidad Militar de Emergencias (UME) llegaron a la mayoría de sus residencias para desinfección, pero que a veces "empeoraban las cosas" que ellos hacían.
Vivas ha reconocido que tuvieron problemas puntuales para que las funerarias recogieran a tiempo los cadáveres, pero que sus centros cuentan con tanatorios refrigerados donde podían permanecer más tiempo. "Tuvimos algunos problemas porque las funerarias trabajaron a destajo en esa época muy complejo", ha dicho.
El interviniente también ha reconocido que la Administración regional no les ofreció derivación de residentes a hoteles medicalizados o al hospital de Ifema, pero tampoco se la pidieron. Y concluye que, pese a todo, la Comunidad de Madrid puso todos los medios disponibles para luchar contra la pandemia en la primera ola de las residencias.