MADRID 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Española contra la Meningitis (AEM) celebra la incorporación de la vacuna contra el meningococo B a partir del 2022 en Cataluña y a partir del próximo mes en Andalucía, sumándose a Canarias y Castilla y León únicas comunidades autónomas en las que ya estaba incluida.
"Se deben adoptar las decisiones para aprobar un calendario vacunal único y un protocolo para que los afectados puedan recuperar su vida cuanto antes. Hay vida tras la meningitis", ha afirmado Cristina Regojo, presidenta de la AEM.
Para la asociación, la vacunación es un "pilar fundamental" en la lucha contra la meningitis. Sin embargo, tal y como recuerdan, en España existe una fotografía de desigualdad ya que el calendario nacional de vacunal no incluye la vacuna contra el meningococo del serogrupo B.
"Con los anuncios de Cataluña y Andalucía, logramos que un 44% de la población española tenga la protección contra la meningitis B a su alcance. Desde la AEM seguimos solicitando al resto de CCAA y al Ministerio de Sanidad que homogenicen el calendario vacunal y acaben con una desigualdad social latente," ha añadido.
El meningococo B es el responsable del 65% de los casos de meningitis en España. Una enfermedad poco frecuente pero que se manifiesta de forma agresiva y súbita. Un 55% de los supervivientes sufren secuelas como la amputación de algún miembro, afectando a su vida laboral y por el que alrededor del 60% requiere de apoyo emocional continuo.
La asociación ha presentado un manifiesto, junto a cuatro asociaciones médicas y al que se siguen sumando otras organizaciones, instituciones y personas de toda España, que recuerda que la meningitis es una enfermedad infecciosa prevenible mediante la vacunación y pide a los políticos que incluyan en el calendario vacunal la vacuna contra la meningitis B, como acaba de recomendar Francia, ya que es la variante que más casos genera.
También persigue que España se incorpore a la hoja de ruta de la Organización Mundial de la Salud para acabar con la enfermedad en 2030. "Estamos en un escenario post covid, en el que enfermedades como la meningitis, volverán a aumentar su incidencia y debemos volver a poner el foco en este tipo de enfermedades que, como la meningitis, causan graves secuelas como sordera, amputaciones o daños cerebrales a cualquier edad y que tiene una carga económica y social muy alta para los afectados", concluye.