MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El absentismo laboral de los obesos se multiplica por dos respecto a las personas con peso normal, según muestran los resultados de un estudio realizado en una multinacional del automóvil en el que se analizan la incidencia de la obesidad en la plantilla, la productividad de los obesos y sus costes laborales, y que ha sido presentado por el presidente de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao, Juan Ignacio Goiria, en el seno de la jornada 'Alimentación y Trabajo. El Sobrepeso y la Obesidad'.
Goiria señaló que, tras la investigación, "se constató que la media de días de baja entre los obesos era de 8,5 días, mientras que el mismo aspecto en los trabajadores con normopeso se quedaba en 3,7 días al año". Por otro lado, los trabajadores obesos mostraron "un 4,2 por ciento menos de productividad que sus compañeros con un peso normal".
En referencia al coste humano, señaló que "las patologías asociadas a la obesidad, como diabetes, la hipertensión arterial o las cardiopatías, causan el 80 por ciento de las muertes prematuras entre la población, por lo que se trata de un problema sanitario de primer orden". También indicó que la prevalencia de la obesidad "es en estos momentos muy relevante y, desgraciadamente, va en aumento".
En cuanto a las consecuencias que este problema tiene para la economía de las empresas, el presidente de la sociedad apuntó que el coste anual total asociado al absentismo laboral provocado por los problemas de obesidad de los empleados de la multinacional se estimó en 391.288 euros. Asimismo, la menor productividad desarrollada por los trabajadores obesos se tradujo en unos costes mucho mayores, concretamente, 2.805.390 euros al año. De este modo, el coste total anual para la empresa que supuso la obesidad de sus empleados alcanzó los 3.196.678 euros.
Juan Goiria manifestó que cualquier intervención en la empresa o institución desde el punto de vista corporativo y, en especial, los programas médicos de detección, asesoramiento dietético y de ejercicio físico "más como tratamiento que como recomendación", aportan a la plantilla y a la propia empresa "beneficios mutuos y tangibles, que conllevan una mejor salud de los empleados, una mayor productividad de la compañía e incluso una mejor valoración de su imagen corporativa".