El 42% de los sanitarios afirman estar considerando firmemente abandonar su trabajo, según un informe

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Archivo - Vacuna niño - JOVANMANDIC/ ISTOCK - Archivo
Publicado: martes, 20 junio 2023 18:44

MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -

El 42 por ciento de los profesionales sanitarios afirman estar considerando firmemente abandonar su trabajo, mientras que el 39 por ciento no se sienten orgullosos de su profesión, según los datos publicados en el estudio 'Reimagining Better Health' que ha sido publicado por GE HealthCare.

Según el estudio, esto se debe, principalmente, a factores como una remuneración inadecuada y la falta de conciliación de la vida laboral y personal. Además, el 47 por ciento de los profesionales sanitarios reconocen no sentirse totalmente respaldados por los órganos de dirección.

Estos síntomas de agotamiento tienen un impacto en los pacientes, ya que un 43 por ciento de ellos no se sienten escuchados por los médicos y menos de la mitad (42%) consideran que los profesionales sanitarios no empatizan con su situación personal y cómo afecta a su tratamiento.

El estudio amplía las perspectivas y necesidades de pacientes y profesionales sanitarios para lograr una experiencia más humana y flexible en el cuidado de la salud.

"Tecnologías como la Inteligencia Artificial van a transformar sustancialmente la forma en la que trabajamos en el sector sanitario, un gran reto que requiere que todos estemos alineados y preparados para afrontar con éxito los cambios del futuro", ha explicado el CEO de GE HealthCare en España y Portugal, Luis Campo.

"Para ello, no hay nada mejor que dar voz y empoderar a las personas que están en el centro de los cuidados para identificar los principales problemas y necesidades", ha añadido.

Las tecnologías de IA aplicadas al cuidado de la salud están diseñadas para mejorar la experiencia y los resultados de los pacientes, la automatización de tareas y el aumento de la productividad. Sin embargo, aunque la mayoría de los profesionales sanitarios consideran que ayudan en el proceso de toma de decisiones (61%) y posibilitan intervenciones de salud más rápidas (55%), el estudio refleja que un 42 por ciento sienten confianza por la IA.

El 33 por ciento de los profesionales que tienen más de 16 años de experiencia confían en la calidad de los datos de la IA. Además, los profesionales sanitarios creen que mientras que la IA puede ayudar a reducir desigualdades en el cuidado de la salud (54%), la tecnología es también un elemento a tener en cuenta en la creación de sesgos (44%).

Los pacientes, por su parte, piden mayor flexibilidad respecto a cómo, cuándo y dónde se presta la atención sanitaria como su mayor prioridad para el futuro, por delante incluso de las soluciones tecnológicas que pueden agilizar la detección de potenciales problemas de salud.

Los pacientes también muestran cautela hacia las nuevas formas de prestación asistencial y no confían demasiado en la realización de pruebas en casa o fuera de espacios sanitarios (62%) sin supervisión. Además, les preocupa quién les atiende. Mientras que la mayoría (67%) confía mucho en su médico de Atención Primaria, el nivel de confianza desciende respecto a otros profesionales sanitarios. Poco más de la mitad de los pacientes (52%) no confían en que los profesionales sanitarios que no son médicos o enfermeras, matronas o farmacéuticos les proporcionen una atención sanitaria adecuada.

Mientras que pacientes y profesionales sanitarios desean que los datos de salud estén disponibles en todos los sistemas y plataformas, esto todavía no se ha logrado completamente. De hecho, el 41 por ciento de los profesionales sanitarios no están convencidos de tener acceso a historias clínicas electrónicas fiables y, aproximadamente, un tercio de los pacientes (35%) comparten esta preocupación por parte de los médicos que les atienden.

En cuanto a la evolución del sector, el 99 por ciento de los profesionales sanitarios aspiran a un futuro en el que los pacientes y equipos asistenciales estén más unidos a través de las soluciones tecnológicas; la atención al paciente y tratamientos médicos se lleven a cabo dentro y fuera de los entornos clínicos tradicionales; y exista un ecosistema sanitario que incluya mayor variedad de profesionales sanitarios, algunos que, incluso, todavía no existen.