MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) - La preocupación por aumentar de peso es una excusa común para que los fumadores no dejen de fumar. Un nuevo estudio de investigadores del Centro NNF de Investigación Metabólica Básica de la Universidad de Copenhague (Dinamarca) ha descubierto que tanto empezar a fumar como fumar durante toda la vida puede aumentar la grasa abdominal, especialmente la grasa visceral: la grasa no saludable que se encuentra en lo profundo del abdomen y que está relacionada con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes, accidentes cerebrovasculares, y demencia.