¿Es el verano un factor de riesgo del estrés?

Calor. Altas temperaturas.
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Actualizado: jueves, 26 abril 2018 5:20

   MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

   Un nuevo estudio en estudiantes de medicina encuentra que el verano, no el invierno, es la época en la que las personas tienen más probabilidades de registrar niveles más altos de hormonas del estrés circulantes. Estos hallazgos no intuitivos contradicen los conceptos tradicionales de la agotadora carga física del invierno y el relajado confort del verano. Los investigadores presentan este miércoles sus hallazgos en la reunión anual de la Sociedad de Fisiología Americana que se celebra en el marco de Experimental Biology 2018, que tiene lugar en San Diego.

   El cortisol, a menudo denominado la "hormona del estrés" porque se libera en el torrente sanguíneo durante situaciones estresantes, ayuda a regular los niveles de azúcar, sal y fluidos del cuerpo. La hormona ayuda a reducir la inflamación y es esencial para mantener la salud general. Los niveles de cortisol suelen ser más altos por la mañana y disminuyen gradualmente durante el día. Los niveles son más bajos en la noche para mantener patrones de sueño saludables.

   La enfermedad, la falta de sueño y ciertos medicamentos pueden afectar a los niveles de cortisol más que las fluctuaciones diarias normales. Ahora, investigadores de la Universidad de Ciencias Médicas de Poznan, en Polonia, han descubierto patrones estacionales en los niveles de cortisol en estudiantes de medicina.

   El equipo de investigación estudió a un grupo de mujeres alumnas de medicina en dos días separados en invierno y durante dos días nuevamente en verano. Los científicos tomaron muestras de saliva cada dos horas durante cada periodo de prueba, un ciclo completo de 24 horas, para medir los niveles de cortisol y los marcadores de inflamación. Los voluntarios completaron un cuestionario de estilo de vida durante cada sesión de prueba sobre su horario de sueño, el tipo de dieta que siguieron y los niveles de actividad física.

   Estudios previos sobre la variabilidad estacional del cortisol han mostrado hallazgos inconsistentes, posiblemente porque los participantes fueron evaluados en sus propios hogares y no en un entorno uniforme. Sin embargo, en el estudio actual, el equipo de investigación encontró que los niveles de cortisol eran más elevados en las fechas de los análisis durante el verano. Los niveles de inflamación no cambiaron significativamente entre las estaciones.