Un poco de ejercicio para compensar la vergüenza de ser fumador

Actualizado: viernes, 21 agosto 2015 17:31

   MADRID, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -

   Investigadores de la Universidad Concordia en Monreal, en Canadá, aseguran que los jóvenes fumadores suelen tener un sentimiento de culpa o vergüenza como consecuencia de su hábito tabáquico puede servir para que hace que muchos recurran al ejercicio físico para compensarlo e incluso dejar de fumar, según los resultados de un trabajo publicado en 'Preventive Medicine Reports'.

   Las estadísticas muestran un menor consumo de tabaco entre la población joven en comparación con hace unas décadas. De hecho, las cifras muestran como actualmente el 25 por ciento de los adolescentes son fumadores, frente al 40 por ciento de 1987.

   Entre las causas, los expertos apuntan a que el tabaquismo tiene peor imagen que entonces, pero también se ha visto que entre los adolescentes es frecuente combinar el tabaco con una actividad física óptima, algo que podría servir para "equilibrar" el hábito tabáquico "tan poco saludable".

   En el trabajo, los autores analizaron los datos de una encuesta a 1.017 jóvenes de entre 16 y 17 años, fumadores y no fumadores, para medir su nivel de actividad física y la percepción que tenían de sus hábitos de vida, incluido el tabaco.

   Así, mientras que el sentimiento de culpa o la vergüenza era menos común entre las personas deportistas que nunca habían probado el tabaco, entre los fumadores activos que practicaban ejercicio había una mayor culpa relacionada con su cuerpo; mientras que en quienes eran menos saludables y "ni fumaban ni eran personas activos", era mayor el nivel de vergüenza con respecto a su cuerpo.

   "La vergüenza está relacionada con la autopercepción y el autoestima, y refleja una evaluación negativa de uno mismo, mientras que la culpa tiene más que ver con sus acciones y refleja una valoración negativa de un comportamiento específico, en este caso el tabaquismo", ha defendido Erin O'Loughlin, investigador del estudio.

   Este experto cree que es precisamente este sentimiento de culpa el que juega un "efecto reparador" y les lleva a practicar actividad física en busca de una vida más sana y un físico más musculado, especialmente en el caso de los hombres.

   En cambio, las chicas siguen viendo el tabaco como un supresor del apetito, sin caer en la cuenta de que al caminar de forma ligera podrían reducir las ganas de fumar y, al mismo tiempo, conseguir un peso más saludable.