Baleares tiene registrados 64.477 pacientes con diabetes aunque podría haber 120.000 afectados

Sansaloni en Son Espases
CAIB

PALMA DE MALLORCA, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

Baleares tiene registrados 64.477 pacientes con diagnóstico de diabetes, aunque la cifra de personas afectadas podría llegar hasta 120.000, puesto que la mitad de los casos no están diagnosticados.

Por islas, en Mallorca se registran 52.492 casos, 4.572 en Menorca, 4.572, y 7.413 en Ibiza. Además, el 0,4 por ciento (266) corresponde a personas menores de 14 años.

Así se ha informado este jueves con motivo de una visita que el conseller de Salud, Martí Sansaloni, ha realizado acompañado por la presidenta de la Asociación de Personas con Diabetes de Baleares (Adiba), Manuela de la Vega, a las mesas informativas que se han instalado a Son Espases.

DÍA MUNDIAL DE LA DIABETES

Con motivo de la celebración este jueves del Día Mundial de la Diabetes, Sansaloni ha visitado estas mesas donde se han llevado a cabo controles de la glucosa y se ha entregado material divulgativo sobre la diabetes para sensibilizar a la población sobre la importancia del diagnóstico y del tratamiento de la diabetes.

La diabetes es una enfermedad crónica que presenta un síntoma común como son niveles altos de glucosa (azúcar) en la sangre, que se originan por la dificultad o la falta de producción de insulina en el páncreas. Esta hormona es esencial para que el organismo aproveche la comida como fuente de energía. Cuando el azúcar se presenta en exceso en la sangre provoca hiperglucemia y, por tanto, el diagnóstico es de diabetes.

Hay dos tipos de diabetes: la del tipo 1 (pacientes insulinodependientes) y la del tipo 2 (no insulinodependientes). La primera, la padecen las personas cuyo páncreas no es capaz de producir insulina; no se puede prevenir y puede manifestarse a cualquier edad, aunque se diagnostica más habitualmente en niños, adolescentes y adultos jóvenes.

La segunda ocurre cuando el páncreas segrega insulina pero no es capaz de procesar la glucosa de la manera adecuada; este tipo de diabetes corresponde al 90 por ciento de los casos, es típica en los adultos y se desarrolla de manera lenta y gradual en el tiempo.

Además, en ocho de cada diez casos se asocia a la obesidad, puesto que la mayoría de las personas que padecen esta enfermedad también tenía sobrepeso en el momento del diagnóstico. De hecho, el aumento del porcentaje de grasa corporal dificulta el uso correcto de la insulina porque el cuerpo no la procesa de modo adecuado. Dentro de este tipo también se puede dar el caso de la llamada "diabetes gestacional", que se manifiesta en las embarazadas.

DIABETES DE TIPO 1

La diabetes del tipo 1, que se puede transmitir de padres a hijos y es provocada principalmente por una reacción autoinmunitaria que hace que el cuerpo ataque por error las células productoras de insulina del páncreas.

Sus síntomas más habituales son orinar muy a menudo, sed intensa, hambre, fatiga habitual, visión borrosa, pérdida de sensibilidad u hormigueo en los pies y pérdida de peso. Además, es posible sufrir algunos de los síntomas de la diabetes del tipo 1 durante muchos años. El tratamiento recomendable es seguir una dieta y hacer ejercicio físico habitualmente, además de un tratamiento sustitutivo de la insulina.

En el caso de la diabetes del tipo 2, la occidentalización del estilo de vida -comida poco saludable y sedentarismo- explicaría el incremento progresivo de dicha enfermedad, que amenaza con convertirse en la gran epidemia no infecciosa del siglo XXI.

En cuanto a la diabetes gestacional, sus síntomas son leves y los niveles de azúcar suelen volver a la normalidad. El tratamiento recomendable es seguir una dieta sana y hacer ejercicio físico habitualmente, además de un tratamiento con antidiabéticos orales.

Diagnosticar precozmente la diabetes es fundamental para prevenirla de manera eficaz. No obstante, la detección debe hacerse antes y con más frecuencia en los casos de personas obesas o hipertensas, si tienen un familiar de primer grado diabético, si tienen antecedentes de parto con peso del recién nacido superior a cuatro kilos o un diagnóstico previo de diabetes gestacional o si se ha detectado en analíticas previas glucemia basal alterada o tolerancia anormal a la glucosa (estados prediabéticos). Un nivel bajo de actividad, una dieta deficiente y un peso corporal excesivo aumentan el riesgo de sufrir este tipo de diabetes.

La diabetes produce complicaciones microvasculares en los ojos (retinopatía, cataratas, glaucoma), en los riñones (nefropatía diabética, que puede desembocar en insuficiencia renal crónica, lo que puede requerir hemodiálisis o trasplante renal) y en los nervios periféricos (neuropatía diabética, con pérdida de sensibilidad). Además, los pacientes diabéticos tienen más probabilidades de sufrir un infarto de miocardio o un ictus (el 15% de los casos).

ESTRATEGIA DE DIABETES EN BALEARES

Desde el año 2011 se aplica en Baleares la Estrategia de diabetes, que tiene como objetivo establecer acciones diversas dirigidas a mejorar la atención de los pacientes con diabetes. Actualmente, se trabaja en iniciativas como la exploración del pie diabético en dichos pacientes en la atención primaria para prevenir la formación de úlceras, el proyecto piloto de implantación de la retinografía como sistema de cribado de la retinopatía diabética y la educación terapéutica de los pacientes para que logren tener más autonomía.

El próximo 20 de diciembre está previsto que tenga lugar la II Jornada de la Estrategia de Diabetes de Baleares, que servirá para actualizar su implementación, presentar los proyectos actuales e impartir talleres formativos sobre la materia.

También se trabaja para reactivar el Consejo Asesor de la Diabetes de Baleares, órgano consultivo de la Conselleria para asesorar y proponer actuaciones para la defensa y la protección de la salud de las personas con diabetes.