Alimentos ricos en grasas saludables ayudan a reducir la mortalidad

Salmón, aguacate, aceite
ALEXPRO9500
Actualizado: viernes, 22 enero 2016 10:01

   MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

   Comer grasas saludables podría salvar a más de un millón de personas a nivel internacional de morir a causa de enfermedades del corazón y los tipos de cambios necesarios en la dieta difieren mucho entre los países, según subraya una nueva investigación que se publica en 'Journal of the American Heart Association'.

   "A nivel mundial, las políticas se centran en la reducción de las grasas saturadas. Sin embargo, encontramos que habría un impacto mucho mayor en las muertes por enfermedades del corazón si la prioridad fuera el incremento del consumo de grasas poliinsaturadas como sustituto de grasas saturadas y carbohidratos refinados, así como reducir las grasas trans", dice el autor principal, Dariush Mozaffarian, decano de la Escuela de Friedman de Nutrición y Ciencia Política, de la Universidad de Tufts, en Boston, Estados Unidos.

   Los carbohidratos refinados se encuentran en los alimentos azucarados o bebidas y son generalmente altos en almidón o azúcar que se digieren rápidamente y son bajos en nutrientes. Mozaffarian cree que este estudio ofrece, por primera vez, una comparación rigurosa de las cargas de enfermedad del corazón globales estimadas que son atribuibles a una ingesta insuficiente de grasas poliinsaturadas frente a una mayor ingesta de grasas saturadas.

Las grasas poliinsaturadas pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol malo en la sangre, lo que puede disminuir el riesgo de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular. Los aceites ricos en grasas poliinsaturadas también proporcionan ácidos grasos esenciales que el cuerpo necesita --como algunos ácidos grasos de cadena larga._ y están presentes en alimentos como aceites de soja, maíz y girasol, tofu, nueces y semillas y pescados grasos como el salmón, la caballa, el arenque y la trucha.

   Para estimar el número de muertes anuales relacionadas con diversos patrones de consumo de grasas, los científicos utilizaron información de la dieta y la disponibilidad de alimentos de 186 países, e investigación de estudios longitudinales previos, que analizaron a personas durante largos periodos de tiempo, para determinar cómo la ingesta de grasas específicas influye en el riesgo de enfermedades del corazón.

MÁS DE 700.000 MUERTES CARDIACAS POR COMER POCO OMEGA-6

   Con datos de 2010, se estima que en el mundo se producen 711.800 muertes por enfermedades del corazón provocadas por comer muy pocas grasas saludables poliinsaturadas omega-6, como aceites vegetales saludables, en sustitución de las grasas saturadas y los carbohidratos refinados. Eso representa el 10,3 por ciento del total de las muertes globales por enfermedades del corazón.

   En comparación, sólo alrededor de un tercio --250.900 muertes por enfermedades del corazón-- resultan de un exceso de consumo de grasas saturadas en lugar de aceites vegetales más saludables, lo que supone el 3,6 por ciento de los fallecimientos globales por enfermedades del corazón.

   Las grasas saturadas se encuentran en carnes, quesos y productos lácteos grasos, así como aceites de palma y de coco. Los investigadores sugieren que la diferencia se debe a los beneficios adicionales del aumento de grasas poliinsaturadas omega-6 como reemplazo de los hidratos de carbono.

   Además, 537.200 muertes, que representan el 7,7 por ciento de las muertes globales por patologías cardiacas, se producen como resultado de un exceso de consumo de grasas trans, como las presentes en productos procesados, horneados y fritos, así como las grasas para cocinar usadas en ciertos países.

   Comparando entre 1990 y 2010, los autores encontraron que la proporción de muertes por enfermedades del corazón debido a la insuficiencia de grasas poliinsaturadas de ácidos grasos omega-6 disminuyó un 9 por ciento y por las altas grasas saturadas disminuyó un 21 por ciento. En contraste, las muertes por el alto consumo de grasas trans crecieron un 4 por ciento.

NO ES SÓLO UN PROBLEMA DE PAÍSES RICOS

   "La gente piensa de las grasas trans son solamente un problema de países ricos debido a los productos envasados y la comida rápida. Pero, en los países de medianos y bajos ingresos como India y en Oriente Medio, existe un amplio uso de las grasas para cocinar barato, parcialmente hidrogenadas en el hogar y por los vendedores ambulantes", advierte Mozaffarian.

   "Debido a las fuertes políticas, las muertes relacionadas con la grasa trans están bajando en los países occidentales (aunque aún son importantes en Estados Unidos y Canadá), pero en muchos países de bajos y medianos ingresos, las muertes relacionados grasas trans parecen estar subiendo, haciendo de éste un problema global", añade.

   En el estudio, las naciones de la antigua Unión Soviética, en particular Ucrania, tenían las tasas más altas de muertes por patologías cardiacas relacionadas con el consumo bajo de grasas poliinsaturadas omega-6 protectoras del corazón. Naciones tropicales, como Kiribati, las Islas Salomón, Filipinas y Malasia, presentaban las tasas más altas de muertes por enfermedades del corazón vinculadas con el exceso de consumo de grasas saturadas.

   "Debemos ser cautos en la interpretación de los resultados sobre la grasa saturada de las naciones tropicales que consumen una gran cantidad de aceite de palma. Nuestro modelo asume que las grasas saturadas de aceite de palma tienen el mismo riesgo de enfermedades cardiacas que las grasas animales. Muchos de los efectos de colesterol en sangre son similares, pero los estudios a largo plazo no han mirado específicamente el riesgo de enfermedad cardiaca de los aceites tropicales", plantea Mozaffarian.

   "Estos hallazgos deberían ser de gran interés tanto para los responsables públicos como políticos de todo el mundo, adyudando a los países a establecer sus prioridades de nutrición para combatir la epidemia mundial de enfermedades del corazón", concluye Mozaffarian.