Médicos Sin Fronteras (MSF) lamenta que, aunque ya existen dos tratamientos aprobados contra el Ébola, estos no estén disponibles en una reserva de emergencia para su uso en lugares en donde se podrían necesitar en un futuro brote; ya que siguen estando bajo el control exclusivo de sólo dos empresas farmacéuticas estadounidenses, Regeneron y Ridgeback Biotherapeutics.