Protocolo de actuación ante un caso de ébola

Actualizado: miércoles, 6 agosto 2014 13:48

Los centros preparados para esta atención son el Hospital de La Paz en Madrid  y el Clínic de Barcelona

  MADRID, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad dispone de un procedimiento de actuación ante posibles casos de ébola en territorio nacional. Hasta ahora los dos casos sospechosos han sido descartados pero en las próximas horas se trasladará a España desde Liberia al religioso Miguel Pajares, que ha dado positivo en las pruebas del Ébola.

   Este procedimiento, que se consensuó con los responsables de alertas sanitarias de las comunidades autónomas y acordó en la Ponencia de Alertas en la cual participan los responsables de todas las autonomías, tiene como objetivo  garantizar la detección y el diagnóstico precoz de un posible caso de Enfermedad por Virus de Ébola (EVE) "con el fin de adoptar de manera inmediata las medidas de control adecuadas para evitar la aparición de casos secundarios".

   Según explica Sanidad, la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica cuenta ya con un protocolo general de vigilancia de las fiebres hemorrágicas, por lo que tanto la definición de caso como las medidas a seguir propuestas en este procedimiento están basadas en dicho protocolo.

   Según este procedimiento, el paciente es trasladado en una ambulancia especialmente preparada y cuyo personal porte el equipo de protección personal adecuado a una zona de aislamiento estricto en un centro sanitario equipado convenientemente. Según las fuentes consultadas por Europa Press, los centros con unidades y profesionales especializados en tratar la enfermedad del ébola se encuentran en el Hospital La Paz de Madrid y en el Hospital Clínic de Barcelona.

   Dado que no existe un tratamiento específico para el ébola, cuando se tiene sospecha de un caso se inicia tratamiento intensivo de soporte del paciente. Para ello, según el protocolo, están contraindicadas las inyecciones intramusculares, la 'Aspirina', los antiinflamatorios no esteroideos y las terapias anticoagulantes. Esto es para minimizar el uso de procedimientos invasivos y fármacos que puedan provocar el sangrado excesivo del paciente.

CONTROL ESTRICTO DE LOS RESIDUOS

   Para la atención de este tipo de enfermos se extreman las medidas de precaución con los materiales utilizados y de control de residuos. Así, el personal  de limpieza del hospital y los manipuladores de ropa deben usar el equipo de protección individual adecuado al manipular o limpiar el material o superficies potencialmente contaminadas.

   Las superficies, los objetos o equipos contaminados deben ser desinfectados con un desinfectante de uso hospitalario o con una dilución de 1:100 de hipoclorito sódico (lejía) de uso doméstico. La ropa contaminada debe ser incinerada, tratada en autoclave, o colocada en doble bolsa con cierre hermético en el lugar de lavado y lavada urgentemente en un ciclo normal de agua caliente con lejía.

   En el caso de posible contacto con el enfermo, el protocolo diferencia entre contacto estrecho o de alto riesgo, y el contacto casual o de bajo riesgo, que es quien ha coincidido en un mismo espacio con un paciente sintomático pero sin contacto físico directo con él ni con sus fluidos corporales.

   Si ha habido contacto físico directo con un paciente sintomático o con su sangre, orina o secreciones, o con sus ropas, ropa de cama o fómites contaminados con sangre, orina o fluidos del paciente, si ha atendido al paciente o manejado sus muestras sin las medidas de protección correctamente utilizadas (contactos familiares, enfermeros, personal de laboratorio, de enfermería, de ambulancia, médicos y otro personal) se pone en marcha una vigilancia activa supervisada durante los 21 días posteriores a la última fecha de exposición posible a la infección.

   También se considera de alto riesgo quien ha tenido contacto con cadáver de persona fallecida por ébola o ha tenido contacto con un animal infectado con el virus, su sangre, fluidos corporales o su cadáver. A ellos se les aplica el mismo protocolo.

   Ante una sospecha de infección por ébola con ocasión de un viaje en avión se procede a identificar a las personas que durante el vuelo han tenido un contacto de riesgo de acuerdo a las guías del ECDC para la valoración del riesgo de enfermedades transmisibles en aeronaves. A estas personas se les informará de la sospecha, se recogerá la información para establecer contacto individual con ellos y se establece el seguimiento de contactos correspondiente.

   Tampoco es posible realizar autopsia a los pacientes sospechosos de ébola, dada la elevada carga viral de los fluidos corporales y el manejo de los cadáveres de personas fallecidas por esta enfermedad por virus debe limitarse a personal entrenado.